Grammys 2022: La lista de los mejores vestidos está aquí

Los Grammys 2022 siguieron la tradición de ser un evento donde las reglas de la moda no se aplican. La noche más importante de la música cuenta con un desfile de alfombra roja de vestidos atrevidos, atuendos irónicos e intentos de volverse viral. El espíritu extravagante del evento lo convierte en un espectáculo previo animado, pero los invitados de la ceremonia de 2022 parecían ansiosos por desafiar las expectativas. Las estrellas que llegaron al icónico casino MGM Grand de Las Vegas adoptaron el tipo de glamour que no hubiera estado fuera de lugar durante la era Rat Pack. Lady Gaga lideró la manada al llegar en modo cantante, vestida con un vestido blanco y negro de Armani Privé con cola completa y montones de diamantes de Tiffany & Co.

La moda masculina brilló gracias a leyendas como Lenny Kravitz, cuya camiseta de malla plateada, pantalones de cuero y tacones a juego eran pura estrella del rock. Jack Harlow se mantuvo elegante con un look minimalista de Givenchy de pies a cabeza, mientras que Lil Nas X se puso barroco, llevando su afinidad por los adornos a nuevas latitudes con un traje de Balmain con incrustaciones de perlas.

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Por Vogue

Siguiendo con la temática de Las Vegas, el brillo estaba de moda. St. Vincent se convirtió en toda una showgirl con un vestido de Gucci de mangas acampanadas, mientras que Tiffany Haddish tuvo un momento de diva con un vestido dorado de lentejuelas de Prada que se cerraba con un lazo gigante. Las referencias a las colecciones clásicas de las pasarelas fueron tendencia, con Snoh Aalegra y Dua Lipa ofreciendo dos versiones de la musa del Atelier Versace. La nueva rubia Lipa se inspiró en la colección de otoño de 1992 de Gianni Versace con su corsetería y sus tirantes de cuero, dignos de una dominatriz, mientras que el vestido de columna plateado de Aalegra llevaba el material de cota de malla que ha sido un elemento básico de la casa desde 1982.

Los que no hicieron referencia al pasado lo desenterraron. SZA hizo vibrar a los fanáticos de la moda en casa al recuperar el look de cierre de la bucólica colección de primavera de 2006 de Jean Paul Gaultier. La pieza de tul encorsetada y rebosante de flores de seda puso fin a la alfombra roja  con tanta fanfarria como lo había hecho casi 20 años antes.